Publicaciones etiquetadas ‘envíos’

La famosa Gripe Aviar

Escrito por Liberación 2000. Posteado en El Blog de Carmen

Bacteria

En estos días de otoño estamos oyendo que hay que vacunarse de la gripe sobre todo las personas de riesgo, mayores, enfermos crónicos y/o niños. Cada vez que lo oigo me recuerda mi etapa de funcionaria en la Comunidad de Madrid, exactamente en la Consejería de Salud, en el Centro de Salud Pública, que entre muchos temas cuando llegaba esta época la epidemióloga pedía las vacunas correspondientes para la zona en que estábamos, casualmente la misma zona que ahora llevo en Nacex con una delegación, la 2801, es decir, la zona norte (carretera de Burgos). Los Centros de Salud Pública estaban formados por veterinarios, farmacéuticas, médicos y una epidemióloga, en otra entrada recordaré todo lo que se hacía y como me influyo en mi vida, además es interesante comprobar como trabajaban estos especialistas. Pues en esos recuerdos me ha venido cuando sólo una vez yo me vacuné. Tengo que decir que lo pasé fatal, porque era el principio de una gripe pero que nunca rompía a peor, por lo tanto, fueron unos días muy duros. La verdad es que no volví a vacunarme, eso sí, intento tomar vitaminas y naranjas para no constipare mucho, y tengo suerte, porque me constipo muy pocas veces, aunque la peor gripe que suelo coger es en verano.

Pero en realidad lo que me ha venido a la cabeza es el famoso año que nos metieron el miedo en el cuerpo con la Gripe Aviar.

Incluso la Organización Mundial de la Salud la clasificó con el nivel de alerta 6, esto significa “pandemia en curso”. En España llegó sobre el 2006, pero en otros países ya había aparecido anteriormente. A partir de entonces, fuimos bombardeados a noticias de enfermos, de muertos, de cómo lavarnos las manos, de cómo actuar en todo momento y de la posible contaminación de los pollos, gansos, etc, todo animal de granja y que tenía alas.

En esos momentos la histeria se desató en todos los sentidos:

  • Había clientes que nos pedían un plan para saber cómo actuaría Nacex ante esta pandemia. Teníamos información de cómo nos podíamos contagiar: “Se transmite de persona a persona, principalmente por el aire, en las gotitas de   saliva y secreciones nasales que se expulsan al toser, al hablar o al estornudar, así como por contacto con superficies contaminadas.”

Se suponía que, según los malos augurios, íbamos a caer todos uno detrás de otros por la facilidad del contagio. Me acuerdo que hubo que hacer una lista de personas de la empresa según el orden de que cayeran enfermos, por ejemplo, si  Carlos se ponía enfermo, estaba Josito, si éste enfermaba estaba Ángel, si este también enfermaba sería fulano, etc., y así sucesivamente, hasta que al final no quedábamos nadie sin enfermar. Pero como nosotros estábamos preparados para     mandar información desde casa, sólo hacía falta que los paquetes llegaran hasta las plataformas, por lo tanto, ya hablábamos de más personal todavía que podía hacer el trabajo porque el resto estaba sano.

Incluso la Central de Nacex, ante todas las peticiones de los clientes y de nosotros mismos, creó un Plan de Actuación contra la Gripe A. En él, se nos daba información de las actuaciones a seguir en el caso de que la agencia estuviera infectada: cambio de ubicación, los clasificadores de las plataformas, etc., es decir, todo aquello que nos tenía que tranquilizar ante las alarmantes noticias de la pandemia.

También nos dieron unas pautas para la higiene personal:

  • Lávate a menudo las manos con agua y jabón;
  • Evita tocarte los ojos, la nariz y la boca;
  • Cúbrete la boca y la nariz al toser y estornudar (pañuelo desechable) y seguidamente lávate las manos y de vez en cuando desinféctalas con solución alcohólica.

Y esto supuso el negocio para las empresas de jabones especiales que no necesitaba agua y desinfectaban. Yo compré tal cantidad que hoy en día seguimos teniendo jabón, porque ya utilizamos del normal. Se compraron garrafas enteras, se tenía sobre la mesa y cada dos por tres, uno se limpiaba las manos.

Para taparnos la boca y nariz, otro negocio fueron las mascarillas. Llegó un momento que no había existencias de mascarillas normales, ya las comprabas especiales.

Los pañuelos desechables hicieron el agosto. Otros que también hicieron el agosto fueron algunos laboratorios por el tema de las vacunas, no sé si ponerlo en plural o en singular, pero que se hizo caja lo tengo claro. Ante tal alarma, las naciones se pusieron a comprar vacunas como locos, saltaba la alerta de que no había suficientes vacunas, que si España había llegado tarde y no había para todos, etc., etc. La verdad es que no se gastó casi ninguna y no sé qué es lo que hizo el Estado con la cantidad de vacunas que compró en su momento.

También nos dieron medidas de higiene en el ambiente:

  • Ventilar frecuentemente los locales, salas y despachos;
  • Evita tocar con las manos superficies potencialmente contaminadas: interruptor de la luz, manillas, barandilla de escaleras, etc. Se deberán limpiar estas superficies con una solución alcohólica;
  • Utilizar pañuelos de papel desechables y tirarlos a una papelera con tapa;
  • Todas las papeleras estarán con bolsas de basura. Antes de abandonar el centro de trabajo, déjala bien cerrada.

Pues más negocios a la vista, desinfectantes, basuras, basureros, etc., Luego nos pusieron medidas de Distancia Social:

  •  Mantén una distancia mínima de un metro al trabajar directamente con otras personas;
  • Evita las reuniones, utiliza en su lugar el teléfono, videoconferencia o el correo electrónico. Si son imprescindibles limita al máximo su duración;
  • Evita los saludos con apretones de manos, abrazos, besos, etc.;
  • Evita lugares concurridos (supermercados, restaurantes, conciertos, etc.

Lo que hizo que la gente no saliera a la calle sin tener miedo, muchos no dejaban ni que se les besara ni un simple apretón de manos. Fijaros que llegaron a decir o escribir que se evitaran restaurantes, conciertos, etc., y esto lo que suponía para los españoles, pues muchos lo cumplieron, por lo tanto, lo que algunos estaban haciendo negocio con la gripe aviar a otros les estaba perjudicando muy gravemente. Y mientras teníamos el miedo en el cuerpo, la gripe no crecía como lo que habían dicho, pero no tiraban la toalla y seguían insistiendo, era una Pandemia.

Pero lo peor de todo para nosotros es que, en Algete está el Laboratorio que analizaba todas las aves que pudieran tener una ligera duda de que su muerte hubiera podido producirse por la gripe Aviar. Desde Abril del 2005, analizaron aproximadamente unas 489 muestras dudosas, pero que salieron victoriosas y no había problemas. Para el transporte de dichas aves hay un protocolo especial y unos embalajes definidos. Hasta el momento que llegó la histeria colectiva, nosotros habíamos ido entregando paquetes a dicho laboratorio sin ningún problema, no sabíamos lo que transportábamos por lo tanto, dentro de la ignorancia estábamos felices. Incluso en febrero del 2006, el gobierno negó que hubiera llegado a este laboratorio un caso urgente de gripe aviar procedente de Navarra. Nosotros seguíamos las noticias de la evolución de la gripe, pero lo que no nos podíamos imaginar es que se transportara los animales a través de las empresas de transporte, porque tengo que decir, que no solamente éramos nosotros, llegaban de todas las partes y con todos los transportistas. El problema vino un día que el paquete no estaba correctamente embalado. Aunque se supone que había un protocolo de cómo actuar a la hora de transportar éste tipo de “contaminantes” desde la empresa de origen, los nervios y la incertidumbre (pienso yo), hizo que muchos mandaran las aves sin estar correctamente embaladas, y eso supuso que en un momento dado se viera el paquete abierto y la cabeza y el cuello de algo que pudiera ser un pato. La alarma asaltó rápidamente a la oficina, ¿quién lo tocaba? ¿qué se hacía? ¿esto llevamos al laboratorio?. Supongo que la gente que tiene que embalar correctamente estas sustancias no tienen en cuenta la cadena humana que puede estar perjudicada. Yo en ese momento pensé que había que poner todo en cuarentena (estoy exagerando un poco). Pero lo malo fue cuando otro día llegamos al laboratorio con nuestra PDA en una mano y una caja en la otra y nos reciben en el Laboratorio con los trajes que se ve en las películas americanas cuando existe posible contaminación de alguna enfermedad. Todo de blanco, con escafandra, pies blancos, manos blancas, etc., todo un traje de arriba abajo hermético. Y nosotros de calle. Desde detrás de la escafandra, mi conductor pudo adivinar algunas palabras que nos decía que tuviéramos más cuidado a la hora de tocar las cajas. Vuelta a la alerta, dimos negocio a más empresas porque ya también compramos guantes de látex (aunque había gente que era alérgico al látex también) para que no hubiera problemas.

Al final no existió la pandemia, ningún animal de granja o libre se encontró con gripe aviar, hubo muertos, pero no la cantidad tan enorme que se dijo al principio, algunos negocios se enriquecieron y algunas personas y otros pobres pasaron sus peores momentos.

Y nosotros, salimos como siempre, vencedores de todos los retos que el día a día nos presenta éste maravilloso trabajo.

Carmen Ruiz Atienza

No sabemos qué transportamos

Escrito por Liberación 2000. Posteado en Noticias

Caja sorpresas

Podríamos tirarnos horas y horas hablando de las cosas que transportamos o creemos que transportamos, ya que, a no ser que salte mucho a la vista o que el cliente nos lo diga, no sabemos qué  es lo que hay dentro de cada uno de los paquetes que movemos.

Las Plataformas Nacex

Escrito por Liberación 2000. Posteado en El Blog de Carmen

Plataformas Nacex

Ayer, estuve en la Plataforma de Nacex de Madrid y recordé que, en otra ocasión, había pensado en hacer una entrada del blog dedicada solamente a las plataformas que componen la red de Nacex, y ha llegado el día.

Todas las funciones de los componentes de nuestra red son eslabones necesarios para que los paquetes lleguen a su destino en el momento adecuado. Mucha gente no se da cuenta del trabajo y las personas que están detrás del servicio que realizamos. A día de hoy, los paquetes todavía no se tele-transportan en una máquina que hace que las moléculas se disuelvan y aparezcan en otro lugar de la geografía española sin daño alguno. Eso lo podemos dejar para alguna película de ciencia ficción, o quien sabe, para un futuro. Si es verdad que antes transportábamos mucha más documentación porque hoy en día se hace por otros medios y gracias a la firma digital hay más seguridad de quien remite dicha información. Y, según se vayan implantando las nuevas tecnologías, menos nos utilizarán a nosotros para realizar el servicio.

Aunque reconozco que con la documentación se han conseguido grandes adelantos, en tema de paquetería todavía no se ha llegado a ninguna solución, salvo utilizar el transporte, ya sea terrestre, aéreo o marítimo, pero algún tipo de locomoción se utiliza.

Debido a mi mente femenina, el hablar de rutas por carretera es como hablar del mismo diablo. Aunque hay libros que dedican su tiempo a explicar “el por qué las mujeres no entienden un mapa y los hombres no encuentran nada en la nevera”, en mi caso, y aunque soy capaz de leer un mapa (he sido durante mucho tiempo copiloto), no tengo la menor duda que los navegadores fueron el mejor invento para mi después de otro pequeño “electrodoméstico” que no voy a decir el nombre, pero que no es la lavadora.

Las rutas de mis delegaciones las organizan y preparan mis controladores de plano, hombres. Creo que es de los pocos trabajos que hay en la empresa que no sólo no quiero aprender, sino que me costaría un mundo hacerlo.

Tengo que aclarar que estas palabras no son ni machistas ni feministas, sólo que hay que reconocer lo bueno de cada uno de los sexos, y como dice el libro, si se consigue entender que cada uno es muy válido en un área, nos entenderemos mejor.

Una vez aclarado el punto, continuamos con la explicación. Si en una delegación hay que hacer rutas, ¡imaginaros en el resto de la península! Cuando miras el mapa y la ruta, parece que es lo lógico y normal, pero una vez que ya está pensada, contrastada y realizada.

Además, las rutas están vivas (no me he vuelto loca). Están muy vivas y hay veces que hasta muerden. Digo esto porque según las cantidades de paquetes, pesos, medidas y conductores, tienes que tomar decisiones tan importantes como doblar rutas, cambiar recorridos, etc. Y esto ocurre tanto en las delegaciones como en las plataformas. Además, también ocurre que una vez las rutas han salido, pasa cualquier incidencia que hace que tengas que mandar a otro conductor para seguir con ella. Esto puede ocurrir por un accidente, una avería del coche, una enfermedad de un conductor o que alguien utilice a los conductores para algún plan de locura. Ya hemos contado que, hace poco, un conductor mío se topó con un destinatario que le sacó una pistola de balines. Otro día, a la semana siguiente, a otro conductor le pusieron una denuncia por tropezar con una mujer. Esto significó que los dos conductores perdieron esos días de trabajo y los días que han tenido juicios, más el disgusto y el susto. Lógicamente, esto supuso otra nueva organización de las rutas para seguir con el trabajo. Los clientes no se llegaron a enterar de nada. Todo fue entregado correctamente y a tiempo.

Me viene a la memoria cuando un conductor se dirigía a la plataforma y se le olvidaron las palabras, no sabía donde iba, lo que estaba haciendo ni donde vivía. Saber lo sabía, pero no lo sabía explicar. Me acuerdo que la vez que le pasó la crisis más fuerte, cuando hablaba con nosotros, por ejemplo, para decir la palabra postre nos decía: “aquello que se toma después de las comidas y es dulce”.

También he contado cuando tuvo un accidente un mensajero y tuvimos que recoger los paquetes por la carretera. Al día siguiente, estaba todo perfectamente entregado.

Lo mismo ocurre en todas las delegaciones y, por supuesto, en las rutas nocturnas de las plataformas. Aquí en Madrid, hay varias personas que están desde la tarde y la noche organizando y controlando todo lo relacionado con las rutas. Hay en concreto una persona cuya imagen mía de él  es siempre organizando y hablando de todos los cambios que tiene que realizar.

No sé si lo he contado en otra entrada, pero hace años tuvimos un cliente que desde Alemania enviaban unos paquetes no muy grandes llenos de botes de pepinillos en vinagre para un burguer famoso. Normalmente, no lo hacía mediante nosotros, sino por un transporte convencional. Esa vez, les había fallado, y al día siguiente, tenían que estar en los restaurantes para las hamburguesas. Eran varios tráilers y eso significaba muchos paquetes. Y como siempre, cuando otros transportes fallan, ahí estamos nosotros que nunca fallamos.

Hace poco, puse que éramos el 112 del transporte y así es. Estamos para las emergencias y lo que otros no pueden o no saben hacer.

Siguiendo con la narración, una vez que superamos la tensión de la espera de los camiones, nos pusimos como locos a teclear. Ahora, todo sería más fácil, nos habrían mandado un fichero y se hubiera hecho todo automáticamente, pero en esos años, no había llegado la tecnología de los ficheros (todavía utilizábamos los diskettes) y nos pusimos como locos a teclear, a mí me sirvió mi época de grabadora de datos. Además, tuvimos que pedir permiso para llegar más tarde a la plataforma, aunque les íbamos informando de los destinos y los kilos por sí tenían que doblar rutas. Yo iba mandando coches y furgones para que en la plataforma se fuera adelantando trabajo. A última hora, bajamos tres coches y mi furgoneta (Nissan Serena). Llego a plataforma y empecé a descargar los paquetitos, que pesaban cada uno por lo menos 10 kilos. Recuerdo al organizador venir directo hacia mí. No me acuerdo de sus quejas, mi mente sólo recuerda los dichosos paquetes y su dichoso peso y la voz de él en mi oído regañándome. Sólo quería que todo se terminara y que alguien me ayudara. Una vez que me dijo lo que me tenía que decir, se marchó. Yo terminé de descargar.

Otro recuerdo que tengo de él  es en Venecia. Yo en una vaporetta, mirando las casas, los canales, hablando con amigos, relajada y feliz, acababa de empezar mis vacaciones, llevaba un día y suena el teléfono. No me dio tiempo ni a decir hola cuando recibo la regañina correspondiente. La gente de mí alrededor estaba asustada, oían los gritos y yo sin poder decir nada, pero cuando conseguí hablar todo quedó arreglado. Es lo que tienen algunas personas, que son tan buenas que tienen ese pronto, pero luego se quedan tranquilos y a gusto y hacen su trabajo a la perfección. Yo pude seguir con mis vacaciones.

Sin ellos no saldría nada adelante. Las rutas nocturnas, además, han tenido problemas de robos, han sido perseguidos y robados, incluso en marcha. Pero no sólo los Nacex, el resto también. Por eso, algunas veces, hacen los caminos juntos todas las empresas del transporte. Los conductores tienen además el GPS que sabe en todo momento donde se encuentran y que pueden localizar el vehículo en caso de robo. Y así durante toda la noche, y de madrugada, vuelta a las plataformas, a colocar las mercancías para que cuando llegan los conductores de las delegaciones se pongan a cargar y se dispongan a llevarlo a las delegaciones para controlar uno por uno y salgan a repartir.

Es un trabajo en el que todas las horas del día y de la noche hay personal trabajando para que la mercancía llegue a las manos de cualquier persona, no sólo de España sino del mundo, en perfecto estado y controlada.

Ahora, quiero hacer una mención al espantoso accidente de tren ocurrido ayer 24 de Julio en Galicia. Es horrible con tantos muertos y heridos, y sobre todo, con tanta angustia de familiares. Me ha hecho recordar el atentado de Atocha en Madrid y el sufrimiento que tuvimos todo el día, la tristeza y la pena. Aunque no teníamos directamente ningún afectado, todos tenían algún conocido. En esos momentos, me acordé de gente que llevaba sin saber de estas personas mucho tiempo, pero a todos los querías localizar para saber que estaban bien.

En otro momento, dedicaré una entrada al blog sobre este horrible día, pero hoy, quiero dedicar unos momentos a las víctimas, heridos y familiares de este sangriento. Todos estamos con ellos, no en cuerpo, pero si con el alma. Además, envío toda mi admiración a todos aquellos que estando allí están donando sangre y están ayudando. También me viene el recuerdo de las colas de sangre que hubo en Madrid. En estos momentos es donde se demuestra la grandeza de un pueblo y su solidaridad.

Carmen Ruiz Atienza

También disponemos de embalajes especiales

Escrito por Liberación 2000. Posteado en Noticias

Embalaje especial Liberación 2000

Como os comentamos en una de las anteriores entradas del blog, en Liberación 2000/Nacex os ofrecemos un servicio de calidad y con total garantía. Trabajamos para que tus envíos lleguen a su destinatario en perfecto estado. Es por eso, que también disponemos de embalajes para productos especiales.

Tenemos envases para todo tipo de envíos

Escrito por Liberación 2000. Posteado en Noticias

Envases Liberación 2000/Nacex

Al equipo de Liberación 2000/Nacex nos importan tus envíos y su protección. Queremos que lleguen a su destinatario de una forma rápida y en un estado excelente. Es por eso que, te ofrecemos diferentes tipos de envases para que puedas escoger el que mejor se adapta a aquello que quieras enviar.

Esas navidades…

Escrito por Liberación 2000. Posteado en El Blog de Carmen

navidad liberación 2000

Voy a seguir recordando esos momentos difíciles que nos tocó vivir cuando empezamos, sin clientes, sin experiencias, sin dinero, pero con muchas ganas. Así, comprobaremos que no hay mal que dure 100 años, aunque parezca mentira con la que nos está cayendo en estos 6 últimos.

Nos quedamos en las pruebas que nos hacían los clientes para empezar a trabajar con nosotros, cómo nos temblaban las “canillas” y el estómago estaba siempre revuelto. Ahora, recuerdo las Navidades, son fechas que se nos duplica y triplica el trabajo. Cada año es diferente, pero suelen ser una o dos semanas frenéticas. Son fechas en que la plataforma es como una gran “colmena”. No hay ni una hora de descanso, siempre con personal andando y controlando todos los envíos. Rodeados no sólo de paquetes importantes, también de cestas, regalos, bombones, botellas… todo lo relacionado con esas fechas. Si bien, hay que decir, que desde que llegó la crisis, todo esto ha desaparecido casi por completo. Por lo tanto, mis recuerdos son anteriores a que las Navidades fueran tristes.

Para que todo saliera igual que antes de la avalancha, unos meses antes ya estábamos reforzando personal, mensajeros etc., todo preparado para esos días. Os indico algunas anécdotas de esos años:

  • Durante una o dos semanas anteriores a la Nochebuena, estuvimos recibiendo comunicados para organizarnos en una recogida masiva en toda España de unos ordenadores. Sino recuerdo mal de portátiles. Era de suma importancia para el cliente y desde la Central se coordinaron todos los pasos. El cliente no pertenecía a mi zona de explotación, era de Madrid capital. Yo veía pasar un comunicado tras otro y no estaba incluida en esas recogidas tan importantes que había que coordinar al unísono. Pues entonces, tranquilos. No podemos demostrar lo bien que lo hacemos todo (je, je). Amanece el día de Nochebuena, se recibe la llamada del mensajero que recoge por las mañanas la mercancía, y al mismo tiempo el personal de plataforma. Tenemos todos los ordenadores en plataforma y TODOS vienen para nosotros. Se habían coordinado las recogidas, pero nadie nos había avisado que todos juntos llegaban a una sola delegación, la 2801. Son momentos que la lucidez tiene que estar más avispada que nunca. Se estudió el problema y se puso solución. Si se aparecía con varias furgonetas y/o furgones al destinatario, el controlar los ordenadores uno por uno iba a costar un mundo, y al mismo tiempo, el personal parado. Recordemos que era Nochebuena y teníamos mucho trabajo también importante. En ese momento, mi socio decidió parar un camión que pasaba cerca de las instalaciones, se le propuso el negocio y aceptó. El camión lo llenamos con ordenadores (los portátiles de la época) y con el comercial llegamos al destino. Uno por uno fue controlado con el número de ordenador incluido y todo salió perfecto. Nos reímos luego mucho.
  • Es importante decir que tanto en las Nochebuenas como en las Nocheviejas, trabajamos hasta el último momento. Al principio salíamos a la misma hora que cualquier otro día, para el cliente las 20h. Esas fechas son para cenar con la familia, amigos, etc., nosotros también. Nos encontrábamos en que parecía que todo el mundo tenía derecho a ello, pero nosotros estábamos al servicio de pequeños “caprichos”. Me explico. Antes, la 2801 abarcaba más terreno, la antigua 2821 Tres Cantos y la actual 2831 Alcobendas. Todo era 2801 San Sebastián de los Reyes. En Alcobendas existe un barrio de élite, pero de mucha élite, aunque poco a poco, ha ido cambiando. Nosotros no teníamos conocimiento de lo que estábamos transportando, pero resultó ser que algunos pedían la cena que iban tomar en esas noches tan especiales. Nos dábamos cuenta porque el agua empezaba a salirse de las anguilas, o que los capones no estaban muy muertos, que digamos. Hace tiempo que ya no vemos todo esto, pero al principio, si lo vimos algunas veces. Pero llegaba el problema. El mensajero aparecía en la casa correspondiente y lo recibía la criada. Ella no sabía nada de los paquetes y tenía órdenes de no coger nada. El mensajero vuelta a la oficina con los paquetes sin entregar. Se llamaba al teléfono de contacto, los “señores” estaban de celebración y todavía no habían llegado. Se avisó en varios puntos pero al final no se consiguió nada. Cerca de la hora del cierre, llamó el “señor” todo indignado: “¿Cómo es posible que no se le haya dejado la cena?”. Se le explicó todo lo que había pasado. Gritos hacia nosotros. “¿Sabe, señorita, con quién está hablando? Claro que lo sabía, viene en el albarán. El único mensajero que todavía no se había ido a cenar con su familia, le acercó su cena. Feliz Navidad también para los que piensan que sólo ellos tienen derecho a disfrutar de las Nochebuenas.
  • Otro recuerdo que tengo es de mi controlador de plano tan tenso, tan tenso, que se puso a devolver lo que no había comido, porque ni siquiera había salido a desayunar. Cuando pusimos algo para picar nosotros, no tenía color en su cara. Los nervios de esos días no se pueden controlar. ¿Ahora se entiende mejor lo del nudo en el estómago?
  • También había risas, porque es la fecha en que junto a los regalos se ponen las felicitaciones de navidad. Por suerte, todavía no ha sido cambiado por el Whatsapp. Aunque ya no se escribe a mano, se ha perdido la personalización y se hace todo en conjunto (postal, firma y felicitaciones), hay algunas que son muy originales: ¡tienen música y se conectan! Nunca se sabes cuál puede ser. Ya nos es difícil ir al baño entre tantos regalos, como para ir buscando dónde está la postal que suena. En este caso y pero sorpresa, no era una tarjeta. Se han puesto de acuerdo y son varias a la vez. Deben de ser familia. Locura con risas.
  • Es la única fecha donde doy permiso a los mensajeros y al personal que lleven algo puesto de Navidad, por ejemplo, un gorro de Papa Noel, sacan sonrisas a los clientes y a nosotros mismos.
  • Hace unos años, decidí hacer más personal la felicitación de Navidad para los clientes. Con un cliente mío que se dedica a ello, hicimos 3 modelos diferentes. Elegimos el que más nos gustaba, eran tres Reyes Magos llevando los regalos. Estuvo muy bien y a todo el mundo le gustó. El año pasado, con otro proveedor, le expuse que quería hacer algo diferente, le expliqué lo que me gustaría y me dieron el resultado. También tuve que elegir entre varios modelos, pero al final, me decidí por uno. ¡Qué casualidad!, era de la misma temática que la primera que encargué años atrás, pero con la diferencia de que la primera era la típica postal de navidad en papel y la última en formato digital. La podéis ver en nuestra página web. Cada vez que la veo, me emociono.
  • Debido a su alto coste, después de la primera idea de felicitación de Navidad, decidí involucrarme un poco más y hacerla personalmente. El resultado fue muy bonito. Hay que tener en cuenta que era novata y la realicé en Power Point. Hoy en día, hago cosas parecidas pero no tardo nada porque hay maravillosos programas que lo hacen automáticamente. Pero en aquel entonces, lo hice yo sola, segundo por segundo. Elegí, lógicamente, una canción de navidad para la felicitación. Para que la música cuadrara con las imágenes tuve que repetir la canción una y otra vez. Mi personal estaba cansado de mí y mi villancico, porque sonaba continuamente, hasta que quedó perfecta. Estaba muy orgullosa de todo lo que había aprendido para conseguir hacerlo, pero ¡horror! No se podía mandar por correo electrónico, pesaba mucho. Hablando con un informático de central me dijo un truco para que se bajara de peso el correo, pero había que bajar la calidad del sonido. Así lo hice y se pudo mandar, aunque no quedó tan bien como la original. Cuando un cliente comentaba que se oía un poquito mal, les explicaba lo que había pasado y sonreían.
  • Tengo que decir que a mí me encantan las Navidades, por lo tanto, rápidamente empiezo a poner villancicos. Mi personal al principio sonríe, pero supongo que después de unos días, se están acordando un poco de mí y de mi familia, pero como soy la jefa no dicen nada. La intención es  que todos en esas fechas seamos más felices, aun teniendo más trabajo, pero hay que intentarlo.

Desde que empezó la crisis, cada vez tenemos menos trabajo, por lo tanto, todo esto son casi recuerdos que nos gustaría volver a tener, sobre todo, porque ya no se ven esas grandes cestas de regalo, ni aquellas grandes cajas de bombones, ni las botellas de vino y/o cava que llegaban enteras a sus destinatarios. Ni siquiera se ven las postales musicales o se han debido de quedar sin voz.

También es el momento de hacer un detalle al cliente, que en años de crisis también es más pequeñín, pero con la misma ilusión y agradecimiento. Y también es el momento en que los clientes nos dan las gracias con más asiduidad, y además con algún detallito, que siempre nos hace mucha ilusión.

Deseo que las Navidades del 2013 estén llenas de trabajo para todos. Si a mis clientes les va bien, me va bien a mí y es una cadena, y no de favores, sino de trabajo. Que volvamos a tener regalos que mandar, ilusiones y alegría para todos, y además, intentar estar con el espíritu navideño todo el año, porque como algunas anécdotas, hay personas que no tienen el espíritu ni en navidad. Hay otras que queremos tenerlo durante todo el año, pese a quién pese, porque hay tantos pájaros negros que se están haciendo fuertes en estos tiempos de crisis dando malas noticias y siendo pesimistas, que estoy deseando que llegue el final de ésta etapa, para que todos ellos se vayan a la lista del paro, que es de donde no tenían que haber salido.

¿No os parece? Hay que ser y estar positivos.

¡Cuánto quiero a mis clientes!

Escrito por Liberación 2000. Posteado en El Blog de Carmen

Clientes Liberación 2000

Tengo que reconocer una realidad importante en todo negocio. No somos nadie sin los clientes. Para mí, además, los clientes son “El Cliente”. Dentro de procesos comunes, me tengo que adaptar a cada uno de mis clientes individualmente. Todos son importantes y únicos. Es por eso, que se les intenta dar todo aquello que es una necesidad para ellos, no sólo con el servicio propiamente dicho, sino también con todo lo suplementario de nuestra relación contractual. Voy a poner algunos ejemplos:

  • Una gran empresa, con muchos departamentos/centros de costes, puede querer una sola factura con muchas páginas. ¡Así se lo damos!
  • Puede querer que se lo pasemos a formato Excel para poder manejar los datos más cómodamente. ¡Se lo entregamos también!
  • Puede querer que salga una factura diferente por cada departamento o centro de coste para que cada uno de su conformidad de sus gastos. Pues, ¡lo hacemos!

Es decir, facturas a la carta según el cliente. Y si no lo tenemos, estamos dispuestos a pasarlo al departamento de informática para hacerlo, porque en Liberación 2000 disponemos todos los departamentos necesarios para adaptarnos a las necesidades de los clientes.

También tenemos a varios niveles de clientes. Por una parte, el Franquiciador nos tiene a las franquicias como clientes. Por otro lado, nosotros tenemos a nuestros propios clientes. Y siempre estamos mejorando, como he dicho antes, para que las relaciones entre todos sean lo más claras y detalladas posibles.

En otras empresas se suele dar un precio llamativo para el cliente, y a lo largo de sus facturas, se puede comprobar cómo se va incrementando este precio con otros detalles como kilometrajes, segundas entregas, costes bolsas, etc.

En cambio, nosotros siempre hemos luchado para que todo esté en el precio acordado, sin más sorpresas. Además, en nuestras facturas viene hasta un desglose según servicios.

También hacemos todo tipo de estadísticas, y con nuestras integraciones, damos la oportunidad a los clientes de que se las hagan ellos mismo.

En definitiva, lo ponemos todo a la disposición de los clientes.

Tengo que decir, pero, que en estos años que he estado al frente del negocio, los clientes han cambiado mucho. Sobre todo en estos años de crisis.

Cuando al principio de todo, salimos a buscar clientes como locos, que además tenían que confiar en nosotros porque no se sabían ni nuestro nombre, era un tipo de cliente que nos ponía a prueba continuamente. Lógicamente, nosotros hacíamos todo lo posible por cumplir con sus exigencias. La calidad y la eficiencia era lo que más les preocupaba. Estaba claro que el precio era el adecuado para lo que se pedía.

Yo pongo siempre un ejemplo, y al ser mujer es muy visual: no puedes intentar comprarte un traje Armani al precio de mercadillo. Si te compras el traje caro, en cuanto ves que una línea está un poco torcida, vas a reclamar, pero si lo compras en el mercadillo, aunque toda la anchura esté desviada, te callas y aguantas porque ¿qué es lo que quieres tener por lo que has pagado?

Eso nos pasa a nosotros. Se nos ha exigido mucho más que a los demás, pero lo gracioso es que hoy que todo lo que importa es el precio, se pide bajarlo pero se quiere exigir lo mismo que cuando se pagaba más, pero en cambio a las empresas baratas no se les exige incluso siendo el precio parecido al nuestro. ¿Alguien lo entiende?

Recordando a mis primeros clientes, siempre me viene a la cabeza uno que mi antiguo socio estaba deseando hacerle cliente. Yo me dedicaba más a la parte administrativa, facturación, contabilidad, etc., pero un día llamó el cliente para hablar con él. No estaba y no le pudimos localizar (hay que recordar que estamos hablando de que el móvil de esa época era un ladrillo que no era fácil de llevar a todas partes). El posible cliente quería la contestación a la pregunta en ese momento. A mí me temblaba todo el cuerpo. Una mala contestación significaba cerrar esa puerta para siempre. Al final, y ante la imposibilidad de localizar a mi socio, contesté y ¡eureka!, le gustó al cliente y se hizo abonado. En mi vida he sudado tanto como ese día. Era un cliente experto en el transporte y en todas las empresas de transporte. Nos puso e impuso muchos cambios, pero lo hicimos, y durante muchos años fue uno de mis clientes preferidos, porque con todas las exigencias que nos hizo, aprendí sobre el transporte más que otros en muchos años.

Otro cliente (que hoy también sigue siéndolo) estaba tan contento con nosotros, que tuvo que exponer un producto por toda España y sólo quería que por todo el país estuviera mi personal con su producto vigilando todas las etapas.

Eso es lo que buscan los clientes: confianza. Y eso es lo que nosotros estamos dispuestos a dar. Y además, añadimos tranquilidad.

Hoy he estado hablando con un cliente, nos hemos reído un poco hablando de todo esto y de la actualidad. Porque estamos cerca. “Piensa globalmente, pero actúa localmente”. No podemos solucionar los problemas del mundo, pero si hacer más agradable la situación cercana.

En la página web que hemos hecho en Liberación 2000 es lo que hemos buscado también. No sólo damos a conocer nuestros servicios y dónde estamos, también ponemos las noticias de nuestro entorno, de ayuntamientos, puestos de trabajo, cursos, eventos, etc.; y también sobre nosotros, el personal de Liberación 2000, porque somos personas.

Hoy en día, es un poco más complicado. Estamos cansados de visitas de comerciales, ofertas, regateos, etc. El perfil ahora es diferente, nos tenemos que adaptar. El consumidor ahora es digital. Todo lo hacemos con los ordenadores, móviles, Whatsapp y  redes sociales.

Con nuestro Facebook y Twitter es lo que queremos conseguir, conocer mejor a nuestros clientes y saber todavía más cuáles son sus necesidades.

Ahora no hay que buscar a los clientes, son ellos los que nos tienen que encontrar.

Supongo que a vosotros también os puede pasar lo que me ocurre a mí. Me llaman a cualquier hora para ofrecerme una rebaja, un nuevo servicio, y siempre contesto lo mismo, “no me molesten  ¿está en su web explicado? Ya lo miraré yo”. Y, ¿por qué Porque en el momento que a mí me apetezca lo miraré, lo comprobaré y lo aceptaré si de verdad me interesa. Pues lo mismo pasa con los clientes actuales y cada vez, según las nuevas generaciones vayan cogiendo los puestos de trabajo, se dirigirá hacia los nuevos métodos.

De todas las maneras, adoro a todos mis clientes (bueno a los que pagan). Gracias a ellos puedo mantener toda la estructura material y personal para darles un buen servicio. También tengo que decir que, hoy por hoy, el servicio Nacex/Liberación 2000 es el mejor que hay en el mercado, sobre todo por el amplio abanico de complementos que ofrecemos, el inmejorable control, trazabilidad, estadística, etc., para los envíos que nos depositan, que luego, en muchas ocasiones, se repercute en los clientes de mis clientes.

Carmen Ruiz Atienza